
El fondo soberano ADQ, junto con la firma estadounidense de capital privado Energy Capital Partners (ECP), ha formalizado un acuerdo para una asociación de inversión de 25.000 millones de dólares. Esta colaboración tiene como objetivo aumentar la generación de energía en los Estados Unidos, enfocándose especialmente en satisfacer las necesidades de los centros de datos, una infraestructura crítica en la actualidad.
La asociación, que se describe como un esfuerzo a largo plazo, se destinará a atender las crecientes demandas energéticas de centros de datos, empresas de cloud computing de gran escala y otras industrias intensivas en energía. Se espera que la implementación de plantas de energía cercanas a estos centros sea fundamental para asegurar la continuidad y calidad del suministro energético.
ADQ, establecido en 2018 en Abu Dabi, Emiratos Árabes Unidos, se enfoca en inversiones en infraestructura crítica y cadenas de suministro globales. Por su parte, ECP se presenta como el mayor propietario privado de activos de generación de energía y energías renovables en Estados Unidos. Con 225.000 millones de dólares en activos bajo su supervisión, ADQ busca diversificar sus inversiones en el contexto de un mundo cada vez más dependiente de la tecnología y la energía limpia.
Este acuerdo se produce en un contexto de creciente demanda de electricidad en los EE. UU., donde se prevé que el consumo eléctrico aumente drásticamente debido a la proliferación de nuevos centros de datos, fábricas y vehículos eléctricos, así como al incremento de las temperaturas estivales.
La ambición tecnológica de los Emiratos Árabes Unidos
La reciente visita a Washington del presidente del ADQ y asesor de seguridad nacional de los Emiratos, Sheikh Tahnoon bin Zayed Al Nahyan, subraya el interés de este país por fortalecer la cooperación con Estados Unidos en el ámbito de la inteligencia artificial (IA). Los Emiratos buscan acceder a tecnologías estadounidenses que les permitan construir su propia infraestructura, alejándose de una economía tradicionalmente centrada en los hidrocarburos.
Este pequeño pero rico emirato del Golfo ha intensificado sus esfuerzos por invertir en inteligencia artificial, centros de datos y tecnologías de transición energética. En este sentido, el fondo de inversión MGX, en colaboración con Microsoft y BlackRock, ha establecido un consorcio con el objetivo inicial de invertir más de 30.000 millones de dólares en proyectos relacionados con la IA en Estados Unidos.
Recientemente, la gigante de la fabricación de chips Nvidia y xAI, de Elon Musk, se unieron al proyecto, lo que subraya la creciente relevancia de los Emiratos en la carrera por la dominación tecnológica global.