
Descubrimiento de una tumba de un faraón egipcio en Abydos
Arqueólogos han hallado una amplia cámara funeraria de un faraón egipcio aún no identificado en la ciudad de Abydos, datada en aproximadamente 3.600 años atrás, durante un periodo caótico en la historia de Egipto. Este descubrimiento, realizado a siete metros de profundidad en la antigua necrópolis de la Montaña de Anubis, fue anunciado por el Museo de la Universidad de Pensilvania y expertos egipcios. Este hallazgo representa la segunda tumba de un rey egipcio antiguo descubierta en lo que va del año.
La cámara funeraria, despojada de sus tesoros por ladrones de tumbas en tiempos remotos, presenta inscripciones jeroglíficas en ladrillos enlucidos a la entrada, junto a escenas pintadas que representan a las diosas hermanas Isis y Neftis. Aunque el nombre del rey originalmente enterrado allí fue registrado, no ha sobrevivido a las depredaciones. Los arqueólogos sugieren que este faraón podría ser uno de los reyes mencionados en monumentos en Abydos, como Senaiib o Paentjeni, cuyas tumbas aún no han sido localizadas.
La tumba, que forma parte de un complejo funerario más grande del poderoso faraón Neferhotep I, incluye una serie de habitaciones con bóvedas de cinco metros de altura construidas con ladrillos de barro. Este hallazgo se sitúa en el contexto del Segundo Periodo Intermedio, que abarcó desde 1640 a.C. hasta 1540 a.C., un tiempo de fragmentación política en Egipto, donde coexistieron hasta cuatro reinos rivales, incluyendo a los hicsos en el delta del Nilo. La historia política de esta era es fascinante y se encuentra todavía en gran parte sin comprender, representando un periodo de transformación social, política y tecnológica que eventualmente daría lugar al Nuevo Reino.