Si en verano los humanos pasamos un calor infernal y tenemos que ayudarnos de ventiladores, aires acondicionados y abanicos, los perros también viven su particular época de altas temperaturas en las que pueden sufrir más de la cuenta si no contemplamos algunas prácticas en el día a día que les ayuden a llevarlo de la mejor manera. Simplemente siguiendo algunas pautas, muchas basadas en el sentido común, conseguiremos que nuestra mascota evite sustos debido al calor que provoca la época estival.
Pasearlo cuando no haya sol
Una de las dudas que muchos amos tienen acerca de sus mascotas en verano está relacionada con las horas de paseo. Ya no es invierno, ya no hace fresquito. Hace un calor importante y si es insoportable para nosotros, no menos para nuestros canes. Así, hay que tratar de pasearlo las tres veces al día en momentos en los que o bien el sol no haya salido (bien temprano, por la mañana) o en los que estos no golpee con fuerza o se marche (tarde, noche). Hay que evitar a toda costa las horas en las que más pica, como al mediodía, y en las que en la calle no pasa nadie. Por algo será.
Una buena alimentación también es importante y hacerlo también en las horas en las que hace menos calor también puede mejorar el apetito de nuestra mascota, que debido al calor también pierde esas ganas de comer. También es importante ofrecerle un buen pienso, de la mejor marca e ingredientes, como el que se puede comprar en una tienda de mascotas como BigMascotas.com, en la que también es posible adquirir pienso hipoalergenico para perros y alimentación relacionada según las características de nuestros canes. En cualquier caso, consultar en una tienda de mascotas nunca está de más para adquirir comida o accesorios.
Bien hidratados y bien alimentados
Al igual que la comida, la bebida y que nuestro perro esté bien hidratado las 24 horas del día es de vital importancia para su salud. Dejarle agua fresca y limpia en su plato y comprobar constantemente que dispone de ella cada vez que le apetece dar un trago es tan imprescindible como que su bebedero se encuentre en un lugar alejado del sol. Si realizamos un paseo largo, una excusión o un viaje en coche, contar con un bebedero portátil es también clave para la hidratación de nuestro animal, que como sucede con nosotros, también tenemos sed en mitad del camino.
En el mismo sentido, no tiene ningún sentido que con la solana que golpea, cogiéramos la bicicleta y nos fuéramos a realizar el trayecto de nuestras vidas. En verano la actividad deportiva debe bajar y lo mismo sucede cuando paseamos al animal, al que debemos llevar en la medida de lo posible por la sombra y más bien tirando a rápido si es que no lo hacemos por la noche. Tener al perro como norma general en el balcón o terraza tampoco es recomendable en cualquier época del año y mucho menos en verano. Qué decir tiene que mucho menos hacerlo sin que el can tenga posibilidades de entrar en casa.
Desparasitados, ante todo
Una opción divertida y que a nuestros perros puede ayudarles a mantenerse hidratados y reducir la sensación de bochorno es la de mojarlos. Sí, exactamente igual que cuando llegas a casa tras una jornada agobiante de trabajo y te metes en la ducha para quitarte ese insoportable calor, a los perros mojarse también puede ayudarles. Eso sí, se trata de hacerlo únicamente si la respuesta del animal es positiva, ya que no a todas las razas de perros les puede gustar. Así que una fantástica manera de refrescar a nuestro perro pasa por darle un manguerazo de agua fresca.
Que esté perfectamente desparasitado, disponer de una pipeta de recambio y evitar a toda costa que garrapatas, pulgas y demás bichos que aparecen en verano como por arte de magia para integrarse en nuestro perro sin que nadie les haya dado permiso, son las otras consideraciones clave a tener en cuenta para que el verano de nuestra mascota sea, cuando menos, igual de soportable que el nuestro.