Innovadora tecnología háptica basada en chorros de agua
La evolución de los gráficos por ordenador y el sonido 3D espacial ha permitido que el mundo virtual de los videojuegos se amplíe y enriquezca de formas sin precedentes. Sin embargo, más allá de la vista y el oído, la tecnología háptica está revolucionando la manera en la que los usuarios experimentan el tacto en estos entornos digitales. Este avance tecnológico permite, por ejemplo, sentir vibraciones en la silla de juego durante una explosión o experimentar la resistencia del volante al tomar una curva en un simulador de Fórmula 1. Tradicionalmente, estas sensaciones se han logrado a través de dispositivos mecánicos, pero un equipo de investigadores de la Universidad de Maryland propone una alternativa innovadora que utiliza chorros de agua para ofrecer experiencias hápticas realistas.
Durante el reciente Simposio de Software e Interfaz de Usuario de la ACM, celebrado en Pittsburgh, el equipo presentó su tecnología denominada JetUnit. Esta novedosa solución emplea chorros de agua controlados para ofrecer retroalimentación háptica sin mojar al usuario ni a su entorno. Según Zining Zhang, líder del proyecto y estudiante de doctorado en la Small Artifacts Lab, esta tecnología no solo tiene aplicaciones en el ámbito de los videojuegos, sino que también podría convertirse en una herramienta valiosa para mejorar la accesibilidad de usuarios ciegos, proporcionando señales de retroalimentación para la navegación espacial y otras interacciones.
JetUnit es capaz de simular una amplia gama de experiencias táctiles, desde sensaciones sutiles que imitan un toque ligero hasta estímulos más intensos, como si se recibiera una inyección con una aguja. Las pruebas realizadas con usuarios han revelado que esta tecnología crea experiencias hápticas diversas dentro de un entorno de realidad virtual, incrementando la sensación de realismo y el compromiso del jugador. El secreto de esta innovación radica en una delgada membrana impermeable de nitrilo, un material utilizado en guantes estériles, que aísla el agua del usuario, permitiendo crear fuerzas significativas sin riesgo de fugas. De cara al futuro, Zhang prevé la integración de retroalimentación térmica mediante el control de la temperatura del agua, así como la expansión de JetUnit para desarrollar un sistema háptico que abarque todo el cuerpo, lo que abriría nuevas posibilidades para experiencias aún más sensoriales.