España, a la vanguardia de la administración electrónica según la ONU
El último informe de la ONU, titulado *E-Government Survey 2024*, ha colocado a España en el puesto 17 entre 193 países evaluados en cuanto al desarrollo y eficacia de sus servicios públicos digitales. Este informe destaca que España es el décimo país europeo en este ámbito y resalta a Madrid como una de las ciudades más avanzadas junto a Tallin (Estonia) en la automatización de gestiones oficiales. Sin embargo, esta clasificación se basa en datos objetivos como la infraestructura, los recursos disponibles y las capacidades del personal, y no necesariamente refleja la percepción de los ciudadanos sobre la eficacia de estos servicios. A pesar de que la brecha digital en el país ha disminuido a la mitad en los últimos dos años, sigue siendo un desafío significativo.
El Gobierno español atribuye esta buena posición a una estrategia nacional coherente que promueve la colaboración entre diferentes niveles de gobierno, el sector privado y la sociedad civil. Este enfoque ha permitido mejorar las infraestructuras de telecomunicaciones y la capacitación tanto de funcionarios como de ciudadanos en el uso de la administración electrónica. El informe de la ONU también subraya que España se encuentra entre los 20 primeros países del mundo en la asignación de recursos para el desarrollo del gobierno electrónico y en la oferta de servicios en línea, destacando áreas como la gestión de impuestos, registros y licencias.
A pesar de los avances, el Gobierno reconoce que aún queda trabajo por hacer, especialmente en la capacitación de los ciudadanos y en la mejora continua de los servicios digitales. La profesora Celia Fernández Aller, especialista en derecho y nuevas tecnologías, señala que aunque España tiene buenas infraestructuras y herramientas como la firma electrónica, es crucial evaluar la efectividad real de los servicios. Además, la alfabetización digital es un aspecto clave en el acceso a estos servicios, y el envejecimiento de la población genera una brecha que debe ser abordada, garantizando que todos los ciudadanos, incluidos los mayores, tengan acceso a servicios adecuados. La digitalización de la administración pública es un proceso en marcha, y aunque hay un reconocimiento de los logros, los expertos coinciden en que la experiencia del usuario debe ser mejorada para que la administración electrónica sea verdaderamente efectiva y accesible para todos.