El derecho civil queda definido como aquel encargado de regular las relaciones entre las personas físicas o ciudadanos. De esta forma, en cualquier bufete de abogados que se especializa en derecho civil nos encontramos con varios matices de cara a resolver problemas de contratos, o de cara a la redacción de los mismos con el fin de prevenir posibles problemas del futuro.
Un contrato trata de regular las cuestiones contractuales de vínculos entre personas, pero no es nada fácil. Es más, muchos de los casos que requieren solución tienen que ver con que una de las partes no se encuentra conforme pasado un tiempo o ha firmado sin haber sido consciente de algunos aspectos.
De esta forma, la redacción de contratos puede ser, por ejemplo, para la obtención de certificados, contratos de compra o venta de inmuebles, testamentos, la aceptación o renuncia a herencias, así como otros muchos ejemplos.
En el despacho de abogados de Cormeum es posible encontrar una gran experiencia en el sector con profesionales muy conocedores del sistema legal actual. Y es que redactar un contrato no es nada sencillo. Es importante asegurarse de que cumple con los requisitos legales y no deja cabos sueltos. Los contratos mal redactados suelen llevar a cabo problemas en el futuro y un desembolso de dinero en el futuro.
Los abogados derecho civil son especialistas en la redacción de contratos y todos sus elementos imprescindibles, fórmulas habituales y errores comunes. Para ello debemos saber que los contratos está estructurados de diversas formas pero hay partes que no pueden faltar al crearlo para que conserve su valor jurídico.
Qué debe tener un contrato
En primer lugar, capacidad. Este concepto nos permite dividirlo en la jurídica y de ejercicio. La primera se exige para ser el titular de derechos subjetivos, y la segunda es la cualidad para ejercer derechos y asumir obligaciones sin representación de terceras personas o entidades.
En segundo lugar, consentimiento. Este concepto tiene que ver con la propuesta que se lleva a cabo y que es propuesta por una de las partes y aceptada por otra de ellas. De esta manera, en el consentimiento se manifiesta la concurrencia de la propuesta y la aceptación, así como la causa que debe componer el contrato o el objeto del mismo. Aquí es importante destacar que siempre se anulará un contrato que ha sido creado bajo equivocación fehaciente por una de las partes, intimidación, violencia o fraude de cualquier tipo, siendo además un delito muy grave.
El objeto del contrato es la prestación que ambas partes acuerdan para rendirse bajo el marco del acuerdo. Además, la causa se lleva a cabo en muchos contratos, como de compraventa, y tiene que ver con la parte que da o recibe el lado contratante de una cosa por la otra parte. Por otro lado tenemos la forma. Esto se produce cuando se exige una determinada manera de celebrar el contrato, ya sea escrita, ante un notario, ante testigos o en la circunstancia concursal que deba procederse.
Y a todos los elementos previamente mencionados debemos sumar los elementos, que pueden ser naturales, y son los que se incorporan en el contrato aunque las partes involucradas pueden prescindir de los mismos sin invalidar el contrato. Y por otro lado están los elementos accidentales, los cuales se establecen por disposiciones especiales y no pueden ir en contra de la propia ley.
Además, siempre que se vaya a redactar cualquier tipo de contrato hay que revisar y asegurarse de que son correctos todos los elementos que están presentes. Además, podemos también utilizar herramientas para asegurar que no falta ninguno de los puntos a tener en cuenta de cara a la redacción.
Problemas en los contratos
En muchos casos en los que no se acude a un experto o bufete de abogados, como es el caso de Cormeum, se acusan problemas en las contrataciones civiles. Estos problemas son comunes cuando una de las partes incumple lo estipulado en el contrato o la redacción no ha sido del todo correcta.
En especial se produce en contratos de servicios, de obra, de compra o venta, de arrendamiento y cualquier otro tipo de contrato en cualquier ámbito de la vida civil. Estos contratos son los que constituyen la ley entre los contratantes y deben constituir obligaciones, que en muchos casos no se cumplen y suponen un mayor número de problemas jurídicos derivados. Para ello, es importante asegurarse de que ambas partes cumplen sus obligaciones en los contratos civiles.
Estas obligaciones son las que obligan a ejercer un acción en un plazo de tiempo, como un pago o dar una suma de dinero en un tiempo específico. Todo esto siempre tiene que tener una contraprestación para las dos partes, previamente pautada. El incumplimiento del contrato puede provocar la resolución unilateral del contrato o demandas de carácter civil con cuantiosas sumas de capital.