Nadie debería pasar por Cataluña sin conocer la Costa Brava. Hablamos de un rincón de ensueño, repleto de calas, rocas, cabos y aguas azules que harían las delicias de los amantes de la navegación y de cualquier persona que sepa valorar las maravillas de la naturaleza.
La Costa Brava ha sido el escenario de libros y películas, y también el lugar de inspiración de artistas con reconocimiento mundial. Por estos lugares puedes realizar una excursión inolvidable, o simplemente escaparte un rato del bullicio. Si estás de paso por tierras catalanas, te contamos algunas de las cosas que no debes dejar de hacer en la Costa Brava.
Tómate tu tiempo para conocer LLoret de Mar
No puedes pasar por esta zona sin impregnarte del aire renacentista que llena los jardines novecentistas de Santa Clotilde, ni sin darte una vuelta alrededor de la iglesia de Sant Romà. Y si te apasiona el modernismo, escápate a los mausoleos del Cementerio Modernista de LLoret, donde encontrarás algunas obras de arte de los mejores escultores de aquel tiempo.
Disfruta de un paseo por la Hermita de Santa Cristina, que es la patrona de la ciudad, y no te vayas sin hacer tiempo para conocer la cala y el paisaje. Si tienes tiempo, deberías descubrir además las vistas que tienes en Castell d’en Plaja, una construcción privada a la que merece la pena acceder.
Descubre Calella de Palafrugell, ¡te enamorará!
Hablamos de un bonito pueblo marinero, de esos que tienen encanto. A pesar del paso del tiempo ha sabido conservar la esencia de una zona de pescadores, una característica que dejan muy patente los colores blancos y azules de sus edificios. Lo ideal es visitarlo durante su festival de Habaneras. Pero al menos puedes divisar este municipio desde la Torre de Can Mario. Tendrás que subir 182 peldaños para conseguirlo, pero las vistas panorámicas que vas a obtener bien lo merecen.
Pásate por Cadaqués.Y si es en San Juan una parte de ti se quedará allí
Probablemente Cadaqués te suene a Salvador Dalí, ya que es aquí donde se encuentra el museo y casa del ingenioso pintor. Pero es además una zona turística inolvidable por su paisaje, sus barcos y sus piedras. Cadaqués está lleno de magia y romanticismo, dos notas que se acentúan en la noche de San Juan. De forma que si tienes la ocasión de descubrirlo en esa fecha, hazlo. Te alegrarás.
Relájate en el Estartit
Este es un lugar perfecto para parar un rato y tomárselo de relax. En el Estartit se pueden hacer deportes acuáticos, y también disfrutar de un amanecer espectacular en su mirador. Otra opción es tomar un barco y recorrer la zona, para conocer sus islotes. Sus acantilados son un lugar perfecto para descansar y continuar.
Siente el Medievo en tu propia piel en Peratallada
Un último consejo es que hagas hueco en tu plan de viaje para descubrir Peratallada, un increíble recinto monumental medieval que te dejará sin palabras. A primeros de octubre se celebran sus fiestas medievales, pero sea cuando sea que lo conozcas, deja tu coche delante de los aparcamientos frente a la iglesia de Sant Esteban y visita el sepulcro del Barón Gilabert de Cruilles. Seguro que te sorprenderá.
