Para garantizar que un edificio cumple las condiciones necesarias de seguridad y salubridad mínimas para ser habitado, es necesario que pase la inspección técnica de edificios. En el momento en el que se plantea la compra de una vivienda, el alquiler de un local comercial u oficina, es importante tener en cuenta si el edificio o edificación dispone del CIT (certificado de inspección técnica) para así estar seguro de que la edificación es segura para su uso.
Qué es la Inspección Técnica de Edificios
La ITE o Inspección técnica de edificios es una técnica que tiene como objetivo la rehabilitación y conservación de edificios para asegurar que cumplen las condiciones adecuadas para su habitabilidad o uso.
La Gerencia de Urbanismo es la encargada de realizar la inspección técnica de edificios a través de sus técnicos competentes, siendo la encargada de emitir el certificado de inspección técnica, que certifica que un edificio ha pasado dicha inspección técnica.
Las ITE tiene en cuenta una serie de condiciones relativas a la seguridad en la construcción como:
- Seguridad, estabilidad y consolidación estructural: donde se revisa la cimentación, soportes, vigas, paredes de carga etc.
- Seguridad y estabilidad de los elementos constructivos: relativo a todos aquellos elementos de la construcción y su posible peligrosidad para las personas, como techos, barandas, etc.
- Evitar filtraciones de agua: revisión de techos y fachadas para comprobar que no permiten las filtraciones de agua.
- Seguridad y conservación: medidas de seguridad y conservación de electricidad, fontanería y saneamiento.
Por lo tanto la ITE es el mecanismo por el cual las administraciones controlan el estado de los edificios, y evalúan sus niveles de seguridad y salubridad. Se trata de una especie de ITV para edificios, que dará un resultado favorable o desfavorable. En caso de resultado desfavorable, se tendrán que aplicar las medidas necesarias para que la edificación pueda pasar el examen técnico y cumpla así, con las garantías necesarias de seguridad.
La importancia de pasar la ITE
La gran mayoría de municipios españoles exigen que sus edificios dispongan del CIT que acredite que han pasado de forma satisfactoria la inspección técnica de edificios. Normalmente los edificios de más de 50 años están obligados a pasar la inspección técnica, pasando revisiones de la misma cada 5 años, aunque estos requerimientos y plazos varían dependiendo de cada Comunidad Autónoma.
Los edificios se deterioran con el tiempo ya que están sometidos a muchos factores que pueden mermar sus estructuras y elementos, como la climatología, el uso de las instalaciones, errores en el diseño o construcción, incidencias extraordinarias (explosiones de gas, terremotos, incendios…). Por eso es importante que todos los edificios reciban una inspección técnica realizada por un profesional capacitado, que permita ver el estado de los mismos y si son necesarias acciones para corregir algún defecto o deficiencia.
El informe de inspección técnica debe estar elaborado obligatoriamente por un arquitecto colegiado que certifique el mismo.
Independientemente de la obligatoriedad de pasar la inspección técnica de edificios, tener el CIT proporciona a una edificación, la seguridad de que cumple las condiciones necesarias para ser utilizada con seguridad.