Los cigarrillos electrónicos son, cada vez más, parte de nuestros ecosistemas urbanos, de forma que es muy fácil ver a diario, a un buen número de personas vapeando por nuestras calles. Las razones para optar por estos productos y abandonar los cigarrillos tradicionales son muchas, por lo que hemos optado por reunirlas y facilitar a los consumidores poder decidir, con todo el conocimiento en su mano, si constituyen la mejor opción para ellos.
Permiten ahorrar
En primer lugar, tenemos que destacar que optar por los cigarrillos electrónicos Aspire puede suponer disminuir considerablemente nuestros gastos, ya que la diferencia de precio entre el dispositivo, los consumibles y los líquidos frente a la adquisición de un paquete de cigarrillos diario, hace que en muy poco tiempo hayamos amortizado nuestra inversión inicial y que, mucho antes de lo que podríamos imaginar, podamos comprobar hasta qué punto suponen un ahorro considerable.
Ponen a nuestra disposición un catálogo enorme de sabores
Sin lugar a dudas, una de las razones que hace que muchos no se decidan a pasarse al cigarrillo electrónico, es que piensan que no van a poder disfrutar de los mismos sabores que cuando consumen su marca de tabaco favorita.
No obstante, lo cierto es que los cigarrillos electrónicos ponen a nuestra disposición un catálogo de sabores prácticamente inagotable, dado que hay líquidos con un sabor muy parecido a los de las marcas de tabaco más conocidas, pero también a menta, a distintas frutas e incluso a bebidas muy populares, motivo por el que además de poder seguir disfrutando del sabor que más pueda atraer a cada uno, podremos tener un sinfín de experiencias que sólo podremos disfrutar cuando nos acerquemos al mundo del vapeo.
Puede ayudarnos a dejar de fumar
Además, tenemos que destacar que hay líquidos con y sin nicotina, la sustancia más dañina y adictiva de cuantas contiene el tabaco, y que los hay que contienen este componente en distintas proporciones, lo que nos permite ir reduciendo nuestra adicción en base a la disminución del consumo de nicotina, hasta terminar por abandonar el hábito de fumar.
No en vano, muchas de las personas que comienzan a utilizar el cigarrillo electrónico lo hacen con el ánimo de dejar de fumar y, desde luego, hay una proporción de ellas bastante importante que lo consiguen, algo que nos lleva a indicar que ante lo que nos encontramos es una gran ayuda a la hora de terminar con esta adicción.
Permite olvidarnos de los malos olores
Uno de los hándicaps que los fumadores, y todavía más los que conviven con ellos, ven en el consumo de los cigarrillos, son los malos olores que el tabaco deja en la ropa, en las habitaciones en las que se fuma y, al fin y al cabo, en toda la casa al completo. A menos que opten por fumar en el balcón y, obviamente, tengan que padecer las inclemencias del tiempo cada vez que salgan a fumar.
A este respecto, conviene saber que los cigarrillos electrónicos no producen absolutamente ningún olor y, por ende, permiten vapear en cualquier rincón de nuestra casa sin tener que padecer las consecuencias del consumo de nuestro tabaco.
Mejora nuestro aspecto físico
Pero además, por si esto fuera poco, la utilización de cigarrillos electrónicos lleva asociado que podamos olvidarnos del mal olor que el tabaco produce en nuestro aliento, que nuestros dientes se vean algo más blancos (dado que la nicotina hace que se amarilleen) y que las manchas que el tabaco produce en nuestros dedos desaparezcan. Por lo que podemos decir, que el vapeo puede ayudarnos a mejorar considerablemente la sensación que transmitimos a las demás personas.
En este mismo sentido, tenemos que comentar que es bien sabido que la sobreabundancia de CO2 en nuestra sangre favorece el envejecimiento, y que cuando vapeamos no introducimos esta sustancia en el organismo, simplemente, porque se produce cuando hay combustión, algo que nos lleva a concretar que el cigarrillo electrónico también puede ayudarnos a retrasar nuestro envejecimiento.