La lavadora es nuestra mejor aliada para mantener la ropa limpia sin esfuerzo, sin embargo, contrariamente a lo que muchas personas creen, este electrodoméstico también debe ser limpiado para mantenerlo en perfectas condiciones y así alargar todo lo posible su vida útil. Recuerda que el ambiente húmedo de la lavadora es perfecto para la aparición de moho, bacterias y otros elementos, de ahí la recomendación de limpiarla de vez en cuando.
Sí, limpiar lavadora es un proceso recomendable y necesario para el óptimo funcionamiento de este electrodoméstico tan importante para la vida diaria. Hacer este proceso de limpieza, al menos dos veces al año, es la mejor garantía para evitar el crecimiento de moho, bacterias y hongos en general, así como también para neutralizar malos olores. Tienes dos opciones, hacer esta limpieza tú mismo o contratar este servicio en Beeping, una plataforma cien por cien profesional, donde podrás contratar de forma rápida y sencilla el servicio de limpieza para tu hogar u oficina, incluyendo la limpieza profunda de este electrodoméstico.
Consejos para limpiar tu lavadora
El proceso de limpieza de la lavadora es considerablemente sencillo y será suficiente hacerlo dos o tres veces al año. Además de la limpieza, es recomendable que después de cada uso, seques la puerta de la lavadora con un paño suave, limpio y seco, tanto interna como externamente; así como también el borde exterior de la goma, siempre con mucha suavidad. Por otro lado, también es recomendable dejar abierta la puerta de la lavadora durante un buen rato después de cada uso.
Las medidas anteriores ayudan a evitar la proliferación de hongos, bacterias y moho, de forma que cuanto más ventilada esté la lavadora, el ambiente será menos propicio para la proliferación de estos elementos. Limpiar la lavadora dos o tres veces al año también eliminará los malos olores, los cuales en muchas ocasiones, traspasan hasta la ropa que lavamos.
Limpiar la lavadora es un proceso sencillo, aunque un poco tedioso, es por esta razón que si no deseas hacerlo, simplemente puedes contratar este servicio adicional en el proceso de limpieza a domicilio.
A continuación compartimos contigo algunos consejos para limpiar la lavadora por dentro, de forma rápida y efectiva:
- Limpieza del tambor: para la limpieza del tambor, puedes utilizar ingredientes que seguramente ya tienes en casa, como puede ser el caso del vinagre. Para ello, deberás colocar medio vaso de vinagre en el compartimento del detergente, y luego programar cualquier ciclo de lavado a 30 grados. En ese tiempo, la combinación del vinagre y el agua caliente dejará la lavadora impecable.
- Limpiar la goma: la goma es la parte más complicada de limpiar y en la que se acumula más suciedad. Con el paso anterior, probablemente haya salido parte de la suciedad, pero no toda. Para ello, deberás estirar la goma con mucho cuidado para no sacarla y frotar un paño con detergente o lejía, para luego pasar un paño húmedo para eliminar el producto y finalmente secar con otro paño que esté seco.
- Limpiar el filtro: busca las instrucciones de tu lavadora para localizar el filtro y así poder limpiarlo de forma efectiva.
- Cajetín del detergente y suavizante: si la lavadora es de carga frontal, este proceso es sumamente simple. Solo debes sacar el cajetín, sumergirlo en vinagre, enjuagarlo, secarlo y listo; mientras que si es de carga superior, deberás utilizar un cepillo de dientes viejo, impregnado en vinagre, frotar bien y secar.
La importancia de limpiar la lavadora
La lavadora es un electrodoméstico olvidado al momento de la limpieza, sin embargo, hacer este procedimiento aumentará considerablemente la vida útil de la misma, además de que proporcionará mejores resultados al momento del lavado.
Es importante limpiar la lavadora con profundidad dos veces al año como mínimo, y el cajetín con un poco más de frecuencia, para evitar que la suciedad acumulada pase a la ropa junto con cada carga de detergente. Es un proceso tedioso, pero necesario, para el óptimo funcionamiento del aparato. Adicionalmente, recuerda secar lo mejor posible la puerta y la goma exterior después de cada uso y dejar abierta la lavadora para que no se acumule tanta humedad en su interior.