Tal y como nos comenta Rubén Gil de Bull Performanze, la era digital ha transformado significativamente el panorama laboral, y con ello, la forma en que adquirimos conocimientos. Ruben Gil, experto en negocios digitales, señala que los métodos convencionales de formación son demasiado lentos para adaptarse a las necesidades actuales.
Adaptación a la nueva realidad
La educación en línea y la autoformación están ganando terreno, permitiendo a los estudiantes aprender a su propio ritmo y centrarse en habilidades relevantes. Este enfoque es más eficiente y prepara mejor a los individuos para el mercado laboral actual.
El crecimiento de la infoproducción
La infoproducción, que incluye la venta de conocimientos y formación en línea, es una industria en auge. Según Forbes, esta industria genera más de 350 millones de dólares diarios y se espera que alcance los 1000 millones para 2025. La pandemia ha acelerado esta tendencia, con un aumento del 400% en la demanda de formación en línea.
Nuevas profesiones digitales
Entre las profesiones emergentes están los videomarketers, copywriters y closers de ventas de alto valor. Estas ocupaciones requieren habilidades específicas y actualizadas, que la formación tradicional no puede ofrecer con la rapidez necesaria.
Necesidad de flexibilidad
El sistema educativo tradicional es rígido y lento, tardando años en actualizarse. En cambio, las profesiones digitales requieren una actualización constante y rápida. Gil sugiere que es más eficaz aprender de profesionales en activo que de académicos desconectados de la práctica diaria.
Conclusión
Rubén Gil nos ha dejado claro que la formación convencional está siendo superada por la rapidez de cambio en las profesiones digitales. La flexibilidad y la adaptación se han vuelto esenciales. Las plataformas de educación en línea y la infoproducción lideran esta transformación, ofreciendo soluciones más rápidas y relevantes. Las instituciones educativas deben adaptarse a esta nueva realidad para preparar adecuadamente a los estudiantes para el futuro laboral. La revolución digital no solo está cambiando el trabajo, sino también cómo aprendemos y nos preparamos para el futuro.