El sueño es un proceso biológico imprescindible para la vida. Son muchos los factores que influyen en la calidad del sueño, no basta con dormir, sino que se debe dormir bien para que el sueño resulte reparador y el día comience con la máxima energía. Como indican desde Mariem´s Latex “la edad, los problemas, los horarios, la actividad física, las comidas y bebidas, los medicamentos, lo que se hace antes de acostarse entre otros muchos aspectos pueden alterar la calidad del sueño y generar dificultades para conciliarlo”.
Las recomendaciones que harán que conciliar el sueño resulte más sencillo son las siguientes:
- “La comodidad del colchón y de la ropa de cama adquiere una importancia superlativa en lo que a sueño reparador se refiere. Y es que, difícilmente se podrá conciliar el sueño en un colchón en el que no nos sentimos todo lo cómodos que deberíamos” señalan desde Mariem´s Latex.
- Practicar actividad física durante el día favorece el descanso durante la noche.
- Conviene intentar mantener unas rutinas y que los horarios sean lo más constantes posible.
- La temperatura habrá de rondar los 18ºC y la habitación deberá estar a oscuras para favorecer la producción de melatonina, hormona producida por el organismo y que induce el sueño.
- Las cenas serán ligeras y no se tomarán excitantes.
- Las siestas no excederán de 20 o 30 minutos para que sean beneficiosas.
Si con todas las recomendaciones anteriores sigue resultando complicado conciliar el sueño, es posible que sufran algún trastorno del sueño, siendo lo más adecuado en estos casos consultar con especialistas. A día de hoy, los trastornos del sueño más comunes son: insomnio, apnea del sueño, narcolepsia, trastornos de conducta asociados al sueño REM, trastornos asociados al sueño de ondas lentas, sonambulismo y terrores nocturnos.
En cualquier caso, el no descansar bien, hará que el día comience con menos energía de la necesaria para enfrentarse a los mil quehaceres diarios, algo que se traducirá en días eternos que no parecen tener fin y en un cansancio acumulado que de seguir así, acabará por pasar factura.