Pese a las últimas noticias con Cataluña como principal novedad constante, el turismo se mantiene en pie. Si bien es cierto que ha habido un descenso en lo que respecta a la visita de turistas en las últimas semanas, el balance global sigue siendo considerablemente positivo.
Si bien en estas fechas del año, el turismo tiende a bajar debido a la bajada de temperaturas y el fin de las tradicionales fechas vacacionales europeas, este año se ha mantenido por encima de otras temporadas. Esto se debe, en parte, a las cálidas temperaturas que se han mantenido elevadas más tiempo del habitual. Lo que ha invitado a que el turismo se siga animando a venir a nuestro país durante un tiempo extra.
¿Además de la hostelería, quién se beneficia de este turismo?
Si existe un turismo que es especialmente sensible a las buenas temperaturas y un ambiente agradable, es el turismo joven. Un turista que viene aquí con varios objetivos distintos. Por un lado disfrutar enriqueciéndose culturalmente de todo lo que tiene que ofrecer nuestro país tanto a nivel gastronómico como cultural. Y por otro lado, conocer y empaparse de la rica vida nocturna que ofrecen las grandes ciudades.
Un ejemplo de esto es la discoteca Opium Barcelona que ha visto como el interés del turismo por la vida nocturna de Barcelona se ha mantenido por encima de lo frecuente en estas épocas. Y es que eso es una clara muestra de que las grandes discotecas son un gran centro de interés para quienes vienen de visita y quieren mezclarse con la vida real española y catalana.
Este patrón de turismo cultural por el día, y vida nocturna en cuanto llega la noche, se cumple con frecuencia en las ciudades de gran tamaño. Aquellos núcleos urbanos con cierta densidad de población, tales como Madrid, Barcelona, Valencia o Alicante, ven cómo sus noches y sus discotecas están llenas de vida de forma apacible y armoniosa.
Algo más de discotecas y playa
Pero no todo se reduce a las discotecas, los bares durante las noches, y las playas y terrazas por el día. Las visitas a lugares de relevancia histórica son una constante durante estas visitas turísticas. Esto es un reflejo que se repite a lo largo de toda la costa principalmente, el buen tiempo junto a la gran cantidad de patrimonio cultural que existe, son un caldo de cultivo perfecto para que germine el turismo en todos los niveles posibles. Es algo que también se puede ver reflejado en ciudades alejadas de la costa y con gran historia en sus murallas. Tal sería el caso de ciudades como Granada y Madrid, aunque Granada bien podría decirse que disfruta de tener una costa dada su ubicación.
¿Hacia donde va el turismo?
Si bien existe una tendencia lógica de la predominancia del turismo de sol y playa durante los meses de más calor, también se produce una presencia turística en zonas cada vez menos tradicionales para este tipo de turismo. Las pequeñas ciudades son cada vez un destino turístico de mayor peso y se espera que siga ganando relevancia durante la temporada baja.