Los beneficios de la natación son muchos y muy variados. Favorecen el funcionamiento del organismo en su conjunto, ya que es un deporte en el que se mueven todos los músculos y las extremidades. Esta práctica es recomendable para cualquier persona que desee mejorar su salud de manera integral, puesto que conlleva ejercicios de todo tipo.
La natación es uno de los deportes más completos que existen. Esta actividad aporta multitud de beneficios que favorecen nuestro organismo. Cuando se practica este ejercicio se mueven tas extremidades del cuerpo (piernas, brazos y tronco), lo cual se traduce en un incremento de la salud en todos los sentidos. Nadar implica cuidar el organismo ejercitando el cuerpo entero, por lo que nunca va a tener resultados negativos. Lo único que hay que tener en cuenta para los principiantes es que el aprendizaje de este deporte, como el de cualquier otro, es un proceso periódico en el que se van adquiriendo competencias y aptitudes poco a poco. La idea al practicar natación no es convertirte en el mejor nadador o la mejor nadadora del mundo, sino en mejorarte a ti mismo y llegar al bienestar externo e interno deseado.
Además, los ejercicios que se efectúan durante la práctica de la natación favorecen la coordinación y la circulación de las articulaciones. De tal modo, se mueven de manera coordinada todos los músculos y las extremidades. También el esfuerzo que se realiza favorece la mejora de la resistencia, ya que está catalogado como un deporte aeróbico a causa del gran movimiento que el cuerpo experimenta durante su agitada actividad.
El material que se requiere para practicar este deporte es muy básico. En la mayoría de los centros de natación exigirán un bañador y un gorro para recoger el cabello. Normalmente, casi todo el mundo usa gafas de natación para nadar, ya que el cloro puede provocar algún daño o malestar en los ojos. Otras personas usan estas gafas porque prefieren ver qué está pasando en todo momento ya sea cuando sumergen la cabeza en el agua, así como cuando salen al exterior.
A continuación, vamos a ver una serie de beneficios fundamentales que aportan el hábito de nadar periódicamente y que favorecen el funcionamiento del organismo mejorando la salud en general.
Relaja el cuerpo y la mente
Al practicar este deporte el cuerpo experimenta una gran relajación, ya que cuando se nada los músculos se esfuerzan en gran medida, lo cual provoca una tensión muscular que lleva a ese estado de relajación y descanso. En consecuencia, el cuerpo siente una sensación de bienestar y tranquilidad. Esta misma sensación se traslada a la mente, la cual también se relaja inmediatamente.
Todos los deportes en los que se debe de controlar la respiración conllevan la consecución de un estado de relajación como ocurre con actividades como el yoga o la meditación. La natación conlleva un ejercicio de respiración evidente en el que se debe de hacer mucho esfuerzo para respirar de manera adecuada en todo momento. Si el proceso de respiración se lleva a cabo de manera correcta, el estado de relajación estará asegurado. En definitiva, cuerpo y mente se unifican para provocar un gran bienestar en la persona que practica este deporte.
Previene el envejecimiento
Varios estudios confirman que las personas que practican natación prolongada y periódicamente tardan más en envejecer. Es imposible corroborar que la práctica de este ejercicio combata la vejez, pero si que ayuda a prevenir el envejecimiento en cierta medida. Digamos que la natación retrasa en cierto modo la evolución de madurez del cuerpo, llegando a ayudar a mantener el organismo más joven.
Pero ¿por qué ocurre esto? La natación es un deporte en el que se ejercitan todos los músculos y extremidades del cuerpo, se mejora la respiración, la resistencia, la circulación, etc. Favorece también a la ingesta de líquidos, ya que después de terminar de practicar ese deporte se suele tener una sensación alta de sed. En base a todos estos beneficios en organismo tarda más en envejecer.
Favorece la capacidad motriz
Cuando se practica este deporte, el cuerpo está en tensión constante y eso conlleva una sensación de alerta. Además, la capacidad motriz de nuestro organismo incrementa. De tal modo que si una persona nada de manera constante, mejora la coordinación de las extremidades y de la respiración. Pero eso no es todo, sino que se observan otros beneficios positivos en la mejora del equilibrio del cuerpo y en el tiempo de reacción ante cualquier situación el cual se vuelve más eficiente y rápido.
Mejora el funcionamiento de la memoria
Está comprobado que la práctica de la natación mejora la memoria de las personas que la ejercitan. El motivo de este sorprendente beneficio es que los ejercicios de respiración que se llevan a cabo mientras se practica este deporte oxigenan el cerebro. De tal modo el cerebro construye conexiones neuronales nuevas que favorecen el funcionamiento de la memoria.