Los frikis ya no nos escondemos de nada ¿alguna vez lo hemos hecho realmente? Pues ahora menos que nunca, estamos orgullosos de nuestros gustos extravagantes y nuestras obsesiones por ciertas cosas que el resto de la población no entiende. Ni falta que hace, eso nos hace únicos.
Suministros frikis
Ser friki, lejos de ser algo despectivo (como lo fue en sus inicios en EE.UU.), se ha llegado a convertir en una auténtica tendencia. Desde que se transformó en moda y como tal alcanzó cotas máximas de seguidores, ya no podemos decir que sea algo original ni diferenciador, aunque la parte buena es que sigue manteniendo su esencia rebelde y descarada intacta.
El estilo friki encandiló al mundo y a todos sus habitantes que quisieron sentirse raros, rompedores y que desearon expresar a través de su frikismo el desprecio a los convencionalismos, el qué dirán y la falta absoluta de reparos a la hora de mostrarse tal y cómo son.
Hasta tal punto ha llegado la cuestión, que la RAE ha decido añadirlo como un adjetivo de uso coloquial para definir aquellas personas que les gusta remar contracorriente y como resultado de ello se enorgullecen de haber creado una imagen pintoresca de sí mismos.
También friki suele referirse a aquellos que practican de forma desmesurada y bastante obsesiva una afición. Y aquí entra todo: series y películas de televisión, héroes de comic, coleccionistas de objetos extraños, juegos de rol, videojuegos, fantasía y un sinfín de locos intereses.
Tanto engloba la definición que raro es quien se salva de quedar definido por ella. Se puede considerar un triunfo de la extravagancia ya que la sociedad ha aceptado en buena medida a las personas con tendencias frikis. Otros individuos frikis, sin embargo, no gozan de tal aceptación.
De hecho, no se trata tanto de la afición propiamente dicha hacia la que profesan su fanatismo, sino más bien de la forma en la que se hace, ya que muchas veces resulta ser impropia de la edad o ser demasiado extraña o perturbadora para personas ajenas al frikismo en general.
En cualquier caso, los frikis están de enhorabuena porque hasta tal punto ha llegado su movimiento insólito que se ha creado toda una red comercial alrededor de las más dispares devociones e intereses. Y donde hay comercio es porque detrás hay una buena masa de consumidores ávidos de encontrar todos esos artículos que les representan a ellos y a su forma de entender la vida.
Para hacerte con casi cualquier producto friki y ser un auténtico abanderado más del frikismo sin complejos, no tienes que irte muy lejos. Existen cientos de establecimientos que realizan sus ventas online, como esta tienda friki donde puedes encontrar prácticamente de todo.
Y no es de extrañar, porque Internet es el medio de vida del movimiento friki. Aquí es donde todos los adeptos se reúnen, forman grupos, debaten en foros, intercambian opiniones, objetos de colección y se ponen de acuerdo para asistir a curiosas convenciones celebradas en todo el planeta.
Unos cuantos clicks bastarán para verte sumergido en un mundo de accesorios que en realidad va mucho más allá: se trata de compartir el amor hacia un hobby en concreto que en un principio es incomprendido por el resto de la humanidad. El sentimiento de pertenencia es muy fuerte.
Ropa friki
Entre toda la mercancía friki, destacan principalmente las prendas de vestir diseñadas y confeccionadas para un público entregado y exigente que busca la diferenciación y la personalización por encima de todo. Eligen cuidadosamente su estilo a la hora de vestir y no compran sin comparar.
Disfrutan tomando decisiones muy pensadas antes de realizar sus adquisiciones y la ropa no es una excepción. Quieren sentirse identificados con sus aficiones a toda costa, así que rebuscan donde haga falta hasta dar con esas prendas que reflejen fielmente sus pasiones y su forma de vivirlas.
Las camisetas originales son el estandarte de la moda friki. Las ilustraciones, los colores y los mensajes en texto pueden representar un sinfín de adorados símbolos, personajes, lugares, etc. Las camisetas frikis son sin duda una inversión prioritaria para todo el que se considere un buen fanático empedernido, es más, cualquiera puede tener unas cuantas en el armario.
A esto se le suma una gran cantidad de accesorios y complementos de todo tipo como gafas, bolsos, carteras o incluso zapatos o botas. Los disfraces son otras prendas de vestir que triunfan en los eventos frikis de todo el mundo y que algunos incluso llevan al extremo de usar sin reparo a diario.
Regalos frikis (y para frikis)
No hace falta que el afortunado destinatario de tu presente sea friki. Puede ser una persona de lo más normal con ciertos gustos particulares que tampoco se excedan demasiado de lo habitual. En el universo friki encontrarás el regalo perfecto para él o para ella, de eso puedes estar seguro.
Y es que los regalos frikis son ideales, porque provocarán sorpresa, alegría y emoción a partes iguales. Piénsalo, todos tenemos esa parte más extraña dentro de nosotros que a veces clama por salir al exterior y gritar ¡estoy aquí, y me da igual si soy raro! Ya no queda casi nadie normal.
Si estás pensando qué regalar y quieres que sea algo original a la vez que barato los regalos frikis nunca decepcionan. Un cumpleaños saldado con el mismo perfume de siempre, otras Navidades aburridas intercambiando bufandas o un aniversario sin pena ni gloria pueden convertirse de un momento al otro en un festival de carcajadas si apuestas por este tipo de los regalos.
Los niños o incluso los bebés no están exentos de ser unos auténticos frikis en potencia. Ellos también tienen cabida en el frikismo más divertido e inocente y además suelen estar encantados de entrar a formar parte del extravagante y singular mundo de sus papás.
Esperamos que hayas cogido buenas ideas para satisfacer tus necesidades freak de lo más variadas. Ser friki nos conecta con esa parte de nuestro mundo interior que al mismo tiempo necesita sentirse conectada con aquellos a los que les apasiona lo mismo, ¡lánzate a por ello y disfruta!