La contratación de tarjetas de débito específicas para viajar permite ahorros considerables en comisiones

Viajar al extranjero conlleva una serie de gastos mayores que los que una persona suele realizar en el día a día en su país de residencia. La necesidad de comer en locales, la compra en comercios o la adquisición de billetes de medios de transporte son algunos de los pagos más frecuentes que se suelen hacer cuando se viaja al extranjero. Muchos de estos pagos se hacen en efectivo y como una persona no suele llevar todo el dinero necesario encima utiliza sus tarjetas para abonar estos pagos o sacar el dinero de los cajeros.

Es en estas situaciones cuando contar con una tarjeta para viajar al extranjero puede representar importantes ahorros para cualquier viajero. En concreto, este ahorro se materializa sobre todo a la hora de sacar el dinero, ya que las tarjetas de débito o de crédito de la banca tradicional cobran una comisiones por hacer estos movimientos en un país extranjero, independientemente de que la moneda sea el Euro u otra divisa.

En este sentido, la reducción de esta comisión por estas operaciones es uno de los aspectos donde se puede ahorrar dinero a la hora de viajar al extranjero por medio de estas tarjetas específicos. Y es que, lo normal es que la banca tradicional cobre una comisión que va del 1% al 4,5% por hacer este tipo de operaciones, un porcentaje normalmente más elevado que el que ofrecen las tarjetas pensadas para para viajar al extranjero.

Entre esta oferta de tarjetas se encuentran las ofrecidas por bancos como, por ejemplo, Revoult, Bnext o N26, bancos completamente digitalizados que ofrecen una importante ventaja a la hora de ahorrar cuando se viaja al exterior a la hora de sacar dinero en los cajeros de los países de destino. Estas entidades, de hecho, no cobran, incluso, ninguna comisión a la hora de abonar directamente con la tarjeta.

Según explican desde el portal especializado ahorro.net, la utilización de estas tarjetas en el extranjero son realmente interesantes por el importante ahorro que representa en concepto de comisiones e intereses. ¿Cuánto cobran estos bancos por este concepto? Vamos a señalar algunos de estos porcentajes.

Antes de empezar, vamos a indicar cuál es el porcentaje que cobran algunos de los bancos tradicionales más importantes en España. Así, por ejemplo, el Banco Santander cobra en todas las operaciones de retirada de dinero en el extranjero un 4,5%, mientras que en Ibercaja la comisión es del 4%. El BBVA, por su parte, cobra por la retirada en tarjetas de débito un 4,5% y un 5% en tarjetas de crédito, un porcentaje similar que el que realizan otras entidades financieras como CaixaBank o Sabadell.

Ante estas comisiones, vemos que la contratación de tarjetas para viajar en estos bancos digitales es mucho más rentable a la hora de ahorrar, ya que ofrecen ventajas como la retirada de hasta una cantidad de dinero de forma gratuita:

• Bnext. Este banco digital es de origen español y permite la retirada de dinero gratis en el extranjero de hasta 500 euros al mes. Una vez superado este límite, la comisión es de 1,15% en los países de la zona euro y del 1,5% en los países de fuera de Europa.
• Revolut. Este banco es de origen británico y, como Bnext, también permite la retirada de cierto dinero de forma gratuita. En concreto, el límite es inferior que el caso anterior, ya que está fijado en 200 euros. En cuanto al tipo de interés, tanto si es en la zona Euro como si no lo es, la comisión asciende hasta el 2%.
• N26. De origen alemán, este banco no ofrece retirada de dinero gratuito, aunque sí ofrece un tipo de interés fijo por la retirada de dinero independientemente del país en el que nos encontremos. Al respecto, el tipo de interés es del 1,7%.

Viendo estas comisiones, podemos observar que el ahorro medio en este tipo de operaciones puede ascender a un 3% de la cantidad extraída en los cajeros, lo que hace especialmente atractiva la consecución de este tipo de tarjetas para ser utilizadas en un país extranjero.

Cómo conseguir una tarjeta para viajar

Al ser bancos digitales, estas empresas ofrecen la ventaja de facilitar tarjetas para viajar de una forma muy rápida, sencilla y sin tener que desplazarse a una oficina. Con estas empresas, con el envío de una foto de la persona que va a ser el titular y de una copia del DNI suele ser suficiente para la tramitación de la tarjeta.

En cuanto al envío y tramitación, la única de los ejemplos anteriores citados que cobra es la británica Revolut, que tiene un coste de 6 euros por el envío de la misma. En los otros dos casos, Bnext y N26, el trámite de la tarjeta es totalmente gratuito, lo que las convierte en una opción muy interesante, ya que tiene un coste mucho menor que el ofrecido por la banca tradicional.