¿Padeces de ansiedad?, ¿estás cansado de los repentinos ataques en el momento menos indicado? Seguramente te habrán dicho que la ansiedad no tiene cura pero, aunque hay una parte de verdad en ello, es importante que tengas en cuenta que la ansiedad se puede controlar hasta tal punto que conseguirás vivir la vida sin un solo ataque más, pero para ello es importante que pongas todo de tu parte para conseguir corregir los problemas que vayan surgiendo durante el proceso.
Qué es la ansiedad y a qué se debe
La ansiedad es un problema que afecta a millones de personas, y precisamente se alimenta del estrés y las exigencias de la sociedad actual, ya que vivimos en un mundo en el que todo va demasiado rápido, tenemos demasías obligaciones y muchas exigencias, de manera que acabamos acumulando mucho estrés el cual acaba desembocando en problemas como la ansiedad.
El problema de la ansiedad es que no se trata de una enfermedad que podamos curar con medicamentos, sino que hablamos de un problema que en cierto modo forma parte de todos y cada uno de los seres humanos, es decir, no existe nadie en todo el planeta que no tenga ansiedad, pero el problema llega en el momento en el que la persona no sabe controlarla.
Lo que ocurre es que vamos acumulando mucha presión en nuestro interior hasta que llega un momento en el que todo sale, de forma que no sabemos exactamente qué es lo que nos está pasando y tampoco tenemos la capacidad de controlarlo, con lo cual alimentamos mucho más la ansiedad ya que precisamente creamos una preocupación adicional en base a que no sabemos de dónde proceden estos ataques.
Es cierto que no existe una cura para la sociedad propiamente dicha, ya que la única forma sería cambiar por completo la personalidad y cambiar definitivamente el estilo de vida, y aun así sería verdaderamente complicado que desapareciese por completo. Sin embargo sí podemos acabar con ella de una forma muy sencilla que no es ni más ni menos que controlándola, y por mucho que os digan podéis estar totalmente convencidos de que la ansiedad sí tiene solución.
Existen algunas causas que favorecen la ansiedad como son los factores genéticos hereditarios, pero también puede estar motivada por algún suceso traumático en la vida del paciente, un exceso de estrés, una carga excesiva de responsabilidades, el sentimiento de fracaso, el hecho de atravesar situaciones muy complicadas para nosotros como puede ser la muerte de un familiar, e incluso también puede venir motivada por una mala alimentación que produzca problemas en nuestra salud como dificultad para conciliar el sueño, aumento del estrés sin lógica aparente, etcétera.
Los síntomas de la ansiedad
Básicamente, cuando hablamos de síntomas de ansiedad nos podemos centrar en que la persona que padece este descontrol recibe información de forma inconsciente acerca de que existe una amenaza hacia su integridad. A tener un ataque de ansiedad no somos conscientes de lo que realmente nos está pasando, pero en realidad se basa fundamentalmente en eso, en que nuestro cuerpo detecta que hay una amenaza.
Para que os hagáis una idea, lo que sentiríamos si vemos que un león que viene a atacarnos es una subida repentina de la ansiedad y adrenalina, la cual es la que nos va a ayudar a escapar, a saltar más de lo que nunca hubiésemos imaginado que podríamos saltar, o incluso ayudar a esa madre a levantar un coche cuando ve a su hijo atrapado bajo las ruedas.
Como podréis observar, la ansiedad tiene sus aspectos beneficiosos, pero el problema es cuando nuestro cuerpo detecta el peligro pero nosotros no somos conscientes de que existe (porque realmente es inexistente), de manera que tenemos una sensación extraña y es inevitable pensar que nos está pasando algo de verdad, con lo cual automáticamente hacemos que aumente todavía más ese nivel de ansiedad.
Por esa razón es muy importante que conozcamos los síntomas de la ansiedad, ya que de esta forma vamos a conseguir averiguar si el momento en el que nos sentimos raros es precisamente debido a estos síntomas, de manera que podremos tener claro que se trata de ansiedad y no nos va a pasar nada en absoluto, lo cual será el primer paso para empezar a controlar los ataques. Eso sí, es muy importante que tengáis en cuenta que controlar la ansiedad es algo que va a requerir mucho tiempo, ya que no se puede solucionar de la noche a la mañana sino que debemos tener una disciplina al respecto y mantener un buen control de todo lo que va sucediendo a nuestro alrededor.
En cuanto a los síntomas podemos destacar los siguientes:
- Falta de aire.
- Sensación de opresión en la zona del pecho.
- Un exceso de sudoración.
- Sequedad en la boca y en los labios.
- Sensación de molestias digestivas.
- Aparición de náuseas e incluso vómitos.
- Temblores inexplicables.
- Taquicardias.
- Rigidez muscular.
- Sensación de hormigueo sobre todo en las extremidades.
- Palpitaciones.
- Mareos.
- Sensación de agobio.
- Sensación de que algo amenaza nuestra integridad.
- Falta de energía para realizar actividades cotidianas.
- Sensación de inseguridad.
- Repentino comportamiento más impulsivo.
- Sensación de estar más en alerta.
- Dificultad para razonar con lógica acerca de lo que está ocurriendo.
- Dificultad para permanecer quietos.
- Rigidez en cualquier parte de nuestro cuerpo.
- Movimientos bastante torpes.
- Cambio en la voz.
Estos son algunos de los principales síntomas que podemos experimentar en el caso de que nos encontremos en el momento en el que se produce un ataque de ansiedad.
Controla la ansiedad de forma natural con estos trucos
Sin embargo, la mejor forma de tratar este problema es precisamente a través de los remedios naturales para la ansiedad, y es que debéis tener muy claro que no existe ningún tipo de medicamento que cure la ansiedad, sino que se trata de un proceso en el que vamos a tener que concienciarnos y dar los pasos adecuados para solucionar el problema, a la vez que deberemos complementarlo con varios consejos que vais a ir conociendo a partir de ahora.
Vamos a mejorar nuestra alimentación, incorporaremos el deporte en nuestra vida, vamos a dejar de lado los abusos de productos que no sean beneficiosos para nosotros como por ejemplo el alcohol, vamos a olvidarnos del tabaco, el cual causa un alto porcentaje de nuestra ansiedad, y por supuesto vamos a recurrir a todos los medios naturales a los que accederéis a través del enlace anterior que nos ayudarán a sentirnos mucho mejor.